Por: Alejandra Vera González, enviada a Buenos Aires.
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Solo dos horas y 15 minutos separan a Concepción de Buenos Aires. A partir del 20 de marzo, la ciudad argentina –y sus innegables atractivos culturales y gastronómicos–, se abre paso con más fuerza como destino turístico, tras la puesta en marcha de los vuelos directos que JetSMART ofrece desde Carriel Sur al Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini, ubicado a unos 35 kilómetros al sudoeste de la capital trasandina y conocido como Ezeiza.
Destino: Buenos Aires
Radio UdeC se embarcó en esta travesía, para conocer la ruta aérea que permite viajar sin escalas cada lunes, miércoles y domingo, desde la Región del Biobío. En ese recorrido encontramos a Marcelo Lillo, un penquista que junto a un grupo de amigos se aventuró a pasar 5 días en la “Ciudad de la Furia”, luego de comprar los vuelos de salida y retorno por 126 mil pesos.
Para viajar directo desde Concepción, los precios de los pasajes incluyendo los tramos de ida y vuelta, bordean los 160 mil pesos, aunque el costo final depende de la anticipación con que se concrete la reserva y los descuentos para el club de socios de la aerolínea.
A la espera del embarque, coincidimos con Jennifer González. Junto a su papá, decidió disfrutar de una semana de vacaciones en Buenos Aires, en un viaje directo que le evitó una escala de, al menos, 6 horas en el Aeropuerto de Santiago.
Para salir de Concepción, el trámite se realiza en los puestos de control migratorio de la Policía de Investigaciones (PDI), que se instalan en el aeropuerto un par de horas antes de cada despegue. Desde 1979, la legislación chilena entrega a la PDI la misión de fiscalizar el ingreso y salida de personas del territorio nacional, por lo que es necesario presentar un documento de identificación, como carnet de identidad o pasaporte.
Una inspección obligatoria para Jennifer, Marcelo y todos los pasajeros. Entre ellos, quienes provienen de ciudades al sur del Gran Concepción, como Renato Scherer, que viajó desde Puerto Montt para cruzar la Cordillera de Los Andes, desde Carriel Sur.
Aterrizamos en la capital Argentina tras 135 minutos de viaje. Nos recibe una metrópoli que no duerme, cargada de espectáculos de tango, con orgullo latente por levantar la copa del último mundial de fútbol, gastronomía donde reina la carne, las pizzas y las milanesas, y la cultura “porteña” acostumbrada a recibir visitantes.
El modelo Visit Buenos Aires
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Según el Observatorio Turístico de Buenos Aires, durante enero y septiembre de 2023, dos millones de turistas internacionales visitaron la ciudad. “Los principales visitantes vienen de la región: Brasil, Uruguay y, tercero, Chile. El chileno viene a consumir espectáculos, a disfrutar de la gastronomía, museos, diseño, moda, y exposiciones. Es uno de los públicos más importantes para nosotros”, cuenta Karina Perticone, directora ejecutiva de Visit Buenos Aires.
De la misma manera que lo hicieron Nueva York, Barcelona y Londres, Visit Buenos Aires tiene por objetivo potenciar la estrategia de proyección internacional de la ciudad, a través de la promoción turística en un marco de cooperación público-privada.
La propuesta, que fue aprobada por ley en 2019, busca alcanzar los 4,3 millones de turistas internacionales anuales en ocho años, generando un impacto económico de más de 3 mil millones de dólares por cada 12 meses.
Según Perticone, la organización oficial de marketing turístico ha cumplido con la misión de maximizar las oportunidades del turismo internacional, fortaleciendo su impacto económico y social en todo el territorio.
Este esquema de gestión -que se financia con el cobro de un derecho de uso urbano a los turistas internacionales- potencia la inversión y tiene proyectado generar más de US$6 millones para la promoción de la ciudad en el mundo. La tasa, que representa menos del 1% del gasto promedio del turista extranjero, se paga por cada persona mayor de 12 años, a través del cobro de una tarifa diferencial según el tipo de alojamiento.
Sobre las posibilidades que se abren con la nueva ruta desde Concepción, la directora ejecutiva de Visit Buenos Aires manifestó que hay altas expectativas, por lo que ya preparan instancias para acercarse a la capital del Biobío, agregando que “el turismo es fundamental para la estrategia de posicionamiento internacional de una ciudad”.
Este modelo permite invertir el presupuesto en cuestiones propias de la actividad turística dentro del destino, como el desarrollo de la oferta, la regulación de los servicios y la puesta en valor de recursos naturales y culturales.
“Pero el viajero que huye tarde o temprano detiene su andar”
“Volver”, el tango emblema de Carlos Gardel, evoca la misma melancolía que sintió Mailen Ríos al llegar a Buenos Aires. En el Aeropuerto de Ezeiza, relata que dejó su natal Argentina para buscar suerte en Concepción, donde reside para trabajar. Cinco años pasaron, y sólo retornó cuando se pusieron en marcha los vuelos sin escales. A punto de regresar a la capital del Biobío, y tras el anhelado encuentro con los suyos, sabe que ahora los viajes pueden ser mucho más frecuentes.
El ingeniero de datos Matías Balboa espera el mismo vuelo rumbo a Concepción, para visitar a sus padres. Y es que mientras muchos chilenos viajan a Buenos Aires por turismo y vacaciones, los argentinos que conocimos toman esta ruta para ver a sus familias, como él, que espera un reencuentro después de 8 años.
En lo que respecta a la proyección de los vuelos que unen Concepción y Buenos Aires, Pablo García, gerente comercial de JetSMART, indicó que “para nosotros la decisión de este lanzamiento se ve reflejada en la determinación de unir regiones y ofrecer conexiones aéreas inéditas en Chile, a precios ultra bajos”.
Desde la aerolínea informaron que esperan trasladar a más de 46 mil pasajeros en el primer año de funcionamiento de esta ruta.
