Cuentas positivas sacaron las autoridades regionales luego del reinicio de los servicios para pasajeros y cargas sobre el puente ferroviario, y el término de las medidas de contingencia que regían sobre los puentes del Biobío. Tras el balance, los representantes no solo se comprometieron a ajustar y disminuir los tiempos de espera de los recorridos del Biotren, sino que también a buscar nuevas alternativas para los problemas de congestión que siguen pesando sobre la ruta 160.
Un buen desempeño tuvo el puente ferroviario en su primer horario punta tras 113 días de evaluaciones y reparaciones. Aunque aún es muy pronto para hacer proyecciones, el presidente de la Empresa Ferrocarriles del Estado (EFE), Eric Martin, afirmó que la estructura se encuentra «en buen pie» y movilizando a una cantidad pasajeros superior en un 3% a la del periodo previo a la falla.
Consultado por el retraso en las salidas de algunos servicios provenientes de Hualqui y Talcahuano, Martin se comprometió a monitorear la situación y a ajustar los funcionamientos de las líneas 1 y 2, sobre todo, a la luz de las nuevas frecuencias.
«Antes íbamos cada 20 minutos, y ahora, cada 15 (…) insistimos en que nos den un poco de tiempo para ver cómo se producen los flujos, y a partir de eso, buscar la mejor solución», sostuvo al respecto el presidente de EFE.
Ante la posibilidad de que nuevos daños puedan afectar a la funcionalidad del puente ferroviario, Martin enfatizó en que el trabajo de reparación y reforzamiento efectuado en las cepas 11, 12, 13 y 14 ha permitido asegurar que no habrá problemas «durante los próximos dos años, es decir, hasta que pongamos en circulación el nuevo puente».
Vehículos y transporte público
Aunque la puesta en marcha del puente ferroviario no produjo efectos relevantes en los flujos vehiculares sobre la ruta 160, sí fue observada una reducción importante en las cargas recibidas por los viaductos que cruzan el Biobío, sobre todo, a lo largo del puente Llacolén. A ello se refirió el seremi de Transportes y Telecomunicaciones, Héctor Silva, quien valoró el levantamiento de las medidas de contingencia.
Una percepción similar compartió el alcalde de Coronel, Boris Chamorro, quien a pesar de agradecer la reapertura del puente ferroviario, apuntó que ello «no va a resolver la situación de colapso de la ruta 160». Por ello, el jefe comunal anunció que buscará acordar con EFE nuevos aumentos para el Biotren, ya sea en frecuencia o en vagones disponibles.
Finalmente, el delegado presidencial regional (s), Humberto Toro, llamó a «pensar, repensar y profundizar» en el rol otorgado a los trenes en materia de transporte público, dada la marcada preferencia que los habitantes de la zona han otorgado al Biotren.
