Jessica Cabrera Torres es la única mujer acuicultora de pequeña escala en la región del Biobío, y una de las pocas a nivel nacional que siembra y cosecha ostra chilena -además de choro zapato, ostiones y mejillones- en su centro de cultivo Granja Marina Cabrera y Guaquin Ltda, ubicado en Coliumo, comuna de Tomé.
Llegar hasta aquí no fue fácil, como ella misma relata, y desde el año 2007, cuando obtuvo su concesión, su carácter, pasión y motivación por este emprendimiento fueron claves para superar las barreras de género, los efectos del terremoto, tsunami y las duras marejadas, tras los cuales levantó una y otra vez sus cultivos con los que hoy produce alimentos de calidad para abastecer a restoranes de la región del Biobío y Metropolitana.
Su iniciativa fue una de las dieciséis seleccionadas por el Instituto Nacional de Desarrollo Sustentable de la Pesca Artesanal y de la Acuicultura de Pequeña Escala, Indespa, en la convocatoria territorial de acuicultura de pequeña escala zona centro sur y sur austral 2023, mediante la cual se adjudicó poco más de $20 millones de pesos para adquirir linternas de cultivo, cabos, una línea madre, boyas y un winche, implementos que contribuirán a potenciar sus faenas productivas.
En el marco de este resultado y de la Semana de las MiPymes y Cooperativas 2023, el seremi de Economía, Fomento y Turismo, Javier Sepúlveda, llegó hasta Coliumo donde hizo entrega a la cultivadora de un reconocimiento por su valiosa labor y aporte al desarrollo de la acuicultura de pequeña escala en la región del Biobío.
Roberto Koch, profesional territorial de Indespa, añadió que el programa Acuicultura a Pequeña Escala busca potenciar la acuicultura a nivel nacional.
Además, a nivel regional, otra iniciativa seleccionada fue un proyecto organizacional en Laraquete, comuna de Arauco.
La acuicultora Jessica Cabrera agradeció el apoyo recibido. “He tenido bastantes requerimientos de clientes a nivel de Chile y también de la zona, y no estaba siendo capaz de aumentar la producción”.
El seremi de Economía, con profesionales de Indespa y Subpesca, se embarcaron desde el muelle de Coliumo junto a la acuicultora, para conocer el trabajo que realiza, y pudieron degustar in situ el producto estrella de la emprendedora.
Ostras de Coliumo
Jessica proviene de una familia de pescadores, sin embargo, el oficio de cultivar el mar lo aprendió desde cero. Se perfeccionó y superó todas las brechas, incluidas las de género. En 2010, el tsunami destruyó por completo su cultivo de entonces, que a punta de esfuerzo y decisión logró reconstruir.
Su actual centro de cultivo cuenta con concesión desde el año 2007, emplazado en la Bahía Coliumo, sector sur Punta Falucho, con una superficie de once hectáreas de mar, donde puede producir hasta cien toneladas por año, cuarenta de ellas para la siembra y cosecha de ostras chilena y japonesa.