En un nuevo capítulo del programa «Presidenciales en Medios UdeC», transmitido desde la Pinacoteca, el candidato independiente apoyado por Chile Podemos Más, Sebastián Sichel, presentó sus propuestas en temas como descentralización, salud y abordaje del conflicto de La Araucanía.
Específicamente, en materia de descentralización, propuso cambiar la ley de rentas municipales, para así incrementar los presupuestos que hoy poseen los territorios. En concreto, el candidato sugirió aumentar el presupuesto desde 8% a nivel municipal, 7% de Gobierno Regional y 15% a nivel del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) hasta el 25% en cuatro años de Gobierno, para que así, en el siguiente mandato se pueda alcanzar el 50%. «El centralismo es muy loco en Chile. La mayoría de las decisiones se toman a nivel central, pero impactan a nivel regional. Quizás, lo más terrible es que una gran parte de las riquezas se generan en regiones y se gastan en Santiago», dijo.
Su propuesta se basa en tres principios. En primer lugar, que parte de los impuestos por concepto de las actividades con cara e identidad regional -como la forestal, pesquera, vitivinícola y agrícola- queden asignados al Gobierno Regional y a los municipios, sin pasar por el área central. Algo como lo que ocurre con la ley de casinos.
Lo segundo tiene que ver con que las decisiones de infraestructura, fomento y desarrollo social se tomen a nivel regional y local. Ello implica no solo descentralizar las facultades de fomento, sino que los servicios públicos dedicados a esta materia y las políticas sociales que focalizan los programas de Estado. Por último, que las decisiones estén lo más cerca posible de los ciudadanos, ya que, en su opinión, se debe avanzar en presupuestos participativos y en la decisión de las prioridades comunales con participación ciudadana.
En cuanto a las decisiones administrativas, Sichel criticó las falencias que regulan el ejercicio de los gobernadores regionales, dado que, a su juicio, no se pensó en los conflictos que se han generado con los delegados presidenciales. En su caso, detalló que se debió avanzar más rápidamente en las tres leyes primordiales para esto: la de rentas regionales, de atribuciones de los gobiernos regionales y de elección de los representantes. Por ello, explicó que en su eventual primer año de gobierno generarán las condiciones para que las autoridades electas tengan infraestructura propia y autonomía, tanto a nivel presupuestario como de toma de decisiones.
En esa línea, el candidato propuso la eliminación progresiva de la figura del delegado presidencial, lo que se haría a través de la creación de un delegado macrorregional y un nuevo seremi que se encargue de la seguridad pública.
Consultado por sus diferencias con el gobierno actual, Sichel expresó que es momento de jubilar al antiguo ciclo de la política para enfrentar el cambio social, el que en su opinión se constituye en cuatro dimensiones: que los sectores más privilegiados den más espacios a una clase media que quiere ser protagonista del poder, el establecer la sustentabilidad ambiental como prioridad en las políticas públicas, el acortar la brecha tecnológica y afrontar el cambio demográfico que hace que grandes ciudades sean lugares poco viables.
En lo concerniente a salud, el abanderado presidencial apoyado por Chile Podemos Más propuso la creación de un Plan Único de Salud financiado por las cotizaciones previsionales de todos los chilenos, el que podría ser licitado.
Respecto de la falta de médicos en zonas rezagadas, como la Provincia de Arauco, Sichel explicó que en primer lugar es necesario aumentar los recursos disponibles para la formación de especialistas en las universidades. A ello, se suma la implementación de una oferta de inmigración especializada y regulada, que agilice los procesos de evaluación de los profesionales de salud que ingresan desde el exterior. Por último, dijo que queda pendiente mejorar los incentivos económicos para propiciar el traslado de médicos a lugares rurales, insulares o con falta de personal.
En relación con la crisis migratoria que atraviesa Chile y parte de Latinoamérica, el candidato apuntó a generar alianzas internacionales para perseguir las dictaduras para, a su juicio, atacar la fuente del problema. Sobre Chile, específicamente, declaró que el conflicto se debe a que «no hay un buen resguardo de las fronteras y no ofrecemos un refugio político serio, porque las visas asociadas a este tema son lentísimas y cuando entran migrantes no tenemos un trato digno».
Su propuesta incluye, además, la construcción de refugios para aquellas personas que no hayan regularizado su situación y, en el caso de que el ingreso sea negado, expulsarlas respetando su dignidad humana.
Para el abordaje del conflicto de La Araucanía, Sichel dibujó una línea entre los actos que considera una usurpación, como las tomas, el control territorial y el robo de madera, y las legítimas demandas del pueblo mapuche, que deben ser tratadas con espacios de negociación, compra de tierras, reconocimiento institucional, apoyo productivo y el establecimiento de cuotas en el Estado y los cargos de representación popular. En su programa, ello está siendo trabajado por una comisión mapuche dirigida por Jaime Huenchuñir, la que está generando medidas al respecto.
Escucha el programa completo con Sebastián Sichel aquí: