Con el 62.86% de las preferencias, la victoria de Rodrigo Vera en Penco fue una de las más resonantes de la elección municipal en el Biobío. El ex consejero regional liderará desde el 6 de diciembre un municipio que por doce años ha estado al mando de Víctor Hugo Figueroa.

Ante un traspaso de mando comunal que no ha estado exento de polémicas y cuestionamientos, el próximo alcalde insistió en la necesidad de que “esta transición democrática sea transparente” y llamó a que “respetemos el cambio” votado por las vecinas y vecinos.

Vera profundizó en la preocupación por eventuales “amarres” de la gestión saliente, situación que mantiene en alerta a los nuevos jefes comunales del Biobío, y por el cual ya sostuvo una reunión con el Contralor Regional. Procesos “a ultima hora”, como el avance del proyecto de nuevo Cementerio Municipal, son algunas de las principales inquietudes.

Asimismo, reflexionó acerca de la compleja situación en la que se encuentra la educación municipal en Penco y reiteró que espera “gestos” de parte de los directores de los distintos establecimientos. “Me llaman personas diciendo que no hay confort en los baños, que no hay material ni hojas para hacer clases, que los centros de padres tienen que costear elementos didácticos para que los niños puedan tener clases, que tienen que hacer bingos y rifas para licenciaturas de kínder, octavo básico y cuarto medio”, aseguró.

Diálogo y proactividad son algunos de los sellos que pretende relevar en su gestión, un “Municipio Ciudadano”, como planteó durante su campaña. Respecto de este desafío, sostuvo que “la hoja de ruta del alcalde Vera estará basada en la participación ciudadana, en la transparencia y en la transversalidad (…) La gente votó cambio y yo tengo una tremenda responsabilidad y compromiso, voy a ser un alcalde de terreno que escuche a la gente”.

Vera adelantó que la asociatividad con el resto de los jefes comunales será clave en su administración y que, en esa línea, solicitarán reuniones con los ministerios de Transportes y de Obras Públicas para avanzar en proyectos fundamentales para el Gran Concepción, como la construcción de la nueva Ruta 150 y la extensión del Biotren.

“Podemos caminar y mascar chicle a la vez, podemos trabajar en el diseño y proyectar los estudios”, declaró.

Finalmente, planteó que “la prioridad para los alcaldes que estamos entrando es mejorar la calidad de vida de los vecinos”. En un contexto en que Penco figura entre las comunas más rezagadas en el Índice de Calidad de Vida Urbana (ICVU) elaborado cada año por la Universidad Católica y la Cámara Chilena de la Construcción, el futuro jefe comunal concluyó señalando que “toda mi cartera de proyectos está basada en crear la imagen Penco-Lirquén, ese es mi gran desafío y mi hoja de ruta”.

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