Tras el anuncio presidencial respecto de la reforma al sistema de pensiones, que entre sus principales ejes considera un modelo mixto, con financiamiento tripartito y donde la capitalización individual se complementaría con solidaridad y el ahorro colectivo, representantes de Biobío en el Congreso anticiparon lo que será el debate en esta materia, adelantando sus diferencias especialmente respecto del destino del 6% adicional de cotización.
El senador Enrique van Rysselberghe (UDI) sostuvo que, si bien están disponibles al diálogo y los consensos necesarios, “es difícil que ese diálogo sea fructífero cuando el gobierno presenta una propuesta que no se hace cargo de problemas estructurales del sistema de pensiones chileno”.
En detalle, dijo, “no hay una propuesta para quienes no ahorran para su jubilación y hay poca claridad de cómo el Estado administrará el nuevo 6%”. Además, agregó que “el Gobierno ningunea a los ciudadanos que han dicho mayoritariamente que quieren que el aumento del aporte previsional vaya a sus cuentas individuales y no a colectivas”.
Su par PS, Gastón Saavedra, llamó a la oposición a no refugiarse «en viejas promesas que han quedado superadas y que fracasaron con el tiempo» y a discutir esta reforma con prontitud, «atendiendo al Chile real».
Junto con valorar los pilares de la reforma anunciada por el Ejecutivo, el legislador sostuvo que el debate tiene que ser propositivo, ya que la meta principal es «construir un país distinto, construir seguridad social y tener mejores pensiones para dejar atrás la condición de pobreza de nuestros adultos mayores».
Por su parte, el diputado Félix González (PEV) valoró la creación de un ente público que administre las eventuales ganancias de los fondos ahorrados. «Me parece que cualquier reforma tiene que ser sin las AFP, que a septiembre acumulan ganancias sobre los US$ 300 millones, utilidades que podrían servir para aumentar las mismas pensiones«, aseguró.
Asimismo, agregó que espera que este debate, «importante para las y los pensionados actuales y futuros, tenga toda la atención y responsabilidad del parlamento para su discusión».
En tanto que la diputada Marlene Pérez (IND-UDI), destacó que «por fin estemos discutiendo algo que es prioridad para las personas».
Si bien valoró el ingreso de nuevos actores a la administración de los fondos, cuestionó al Gobierno por «seguir intentando imponer un sistema de reparto y hacer solidaridad con el dinero de los trabajadores».
En este sentido, planteó que el camino debería ser financiar el componente solidario (PGU) a través de impuestos generales y llamó a que la discusión sea «con celeridad, diálogo y pensando en el bien común».
La ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, adelantó que el texto definitivo será ingresado durante la próxima semana al Congreso para su tramitación, en paralelo a la discusión de otras iniciativas claves para el Ejecutivo, como la Reforma Tributaria.