A medida de que vaya llegando más información respecto al resultado electoral es que las manifestaciones van a ir creciendo. Por lo tanto, las próximas 48 o 72 horas son fundamentales para el gobierno de Maduro, entendiendo que rompió relaciones con varios países de América Latina, entre ellos, el nuestro”. Son las palabras de Javier Pérez, académico de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo (UDD) y otro de los tantos analistas políticos que por estos días tienen los ojos puestos en Venezuela.

Tras la elección presidencial del domingo y la proclamación de Nicolás Maduro como Presidente electo, resultado calificado como fraudulento por la oposición que apoyaba a Edmundo González y por varios líderes políticos del resto del mundo, el especialista asegura que “la tensión internacional y la presión interna van a seguir”, en el marco del régimen dictatorial.

Y los efectos no se hicieron esperar: Venezuela ordenó la expulsión de los representantes de siete países latinoamericanos que cuestionaron la victoria de Maduro, siendo Chile uno de ellos. Eso fue acto seguido de que el Presidente Gabriel Boric alzara la voz (o los mensajes vía redes sociales) como el primer mandatario de la región en pedir “total transparencia en las actas y en el proceso”.

Lo primero que es necesario precisar es que esta tensión entre el Presidente Boric y Maduro ya lleva bastante tiempo, incluso desde que Boric asumió, y con mucha claridad señaló que este gobierno (de Venezuela) era autoritario y dictatorial. Después hubo un sinfín de ‘dimes y diretes’, pero probablemente lo que más generó la última tensión fue el asesinato del teniendo Ojeda”, fundamenta el investigador.

Desde que Nicolás Maduro llegó al poder hace 11 años, para dar continuidad al Chavismo, Venezuela ha experimentado, al menos, cuatro cambios profundos: la mayor ola migratoria en la historia contemporánea de América Latina, ser el primer país del continente investigado por la Corte Penal Internacional por crímenes de lesa humanidad, un nuevo modelo económico sin controles para combatir la mayor inflación del mundo, y una caída histórica de la producción petrolera

Sobre el primer aspecto, Pérez mencionó que “hay muchas hipótesis respecto a que el hecho de que Maduro haya obtenido este resultado, va a generar una nueva ola migratoria”.

En lo que respecta a la capacidad que tiene la comunidad internacional para incidir en lo que pasa en Venezuela y las expectativas puestas en la presión que podría ejercer Estados Unidos o Brasil, el académico menciona que “está la opción de una negociación política, que yo veo bastante baja. Podría Lula haber asumido un rol en esto, pero al parecer no ha querido hacerlo”.

Cabe precisar que la Organización de Estados Americanos (OEA) a través de un comunicado emitido por la oficina de su secretario general, Luis Almagro, denunció este martes que la elección presidencial en Venezuela sufrió “la manipulación más aberrante”.

Escucha aquí la entrevista completa: