En el marco del programa de reconversión del carbón común a carbón activado, inició un proceso focalizado de fomento para la actividad minera de la comuna de Curanilahue.
Una nueva oportunidad de impulsar el desarrollo sostenible de las y los mineros está ofreciendo el Ministerio de Minería en colaboración con la corporación CorpArauco, agente operador intermediario de Corfo, a través del concurso “Equipamiento Innovación Industrial de Baja Escala – Curanilahue”, destinado a apoyar el mejoramiento de las condiciones laborales y productivas de las faenas carboníferas, mediante la entrega de equipamiento minero de innovación industrial.
En entrevista con Radio UdeC, la ministra de Minería, Aurora Williams, dijo que para avanzar en la iniciativa “hemos desarrollado un trabajo desde fines del año 2022 con la Universidad de Concepción, buscando generar un paquete tecnológico para poder producir el carbón, especialmente de la cuenca carbonífera de la región del Biobío, y poder desarrollar carbón activado”.
De acuerdo con lo indicado por las bases técnicas del programa, pueden acceder a este financiamiento proyectos individuales o asociativos. En el caso de las postulaciones individuales, podrán optar a equipamiento minero por un valor que no supere los $6.600.000, cuando la faena tenga más de 10 trabajadores/as contratados/as.
Al respecto, la titular de minería expuso que el concurso ha logrado una buena aceptación, indicando además que las personas y asociaciones interesadas a participar del llamado pueden postular hasta este 27 de septiembre.
Si la faena cuenta con menos de 10 personas contratadas, el monto de postulación no puede superar los $3.000.000, en tanto, las postulaciones asociativas tienen posibilidad de solicitar hasta $7.000.000 para elementos de protección personal, lámparas led, detectores multigas, martillos picadores eléctricos o cables de acero.
En relación a las medidas de protección implementadas en las faenas mineras, Williams planteó que una de las acciones impulsadas por el gobierno se relaciona a la presentación de un proyecto de ley para ratificar el convenio 176 de la OIT, sobre seguridad y salud en las minas.
Los antecedentes históricos dan cuenta que durante los primeros años de la década del 90 la industria nacional del carbón se ve inmersa en una situación absolutamente crítica: altos costos de producción, baja productividad y sobredotación de personal eran sus rasgos más sobresalientes. Los cambios que experimentan las empresas carboníferas desde la década de los ochenta ocasionaron trastornos importantes en sus estructuras de funcionamiento y en la vida de toda la población minera.
Por ello, en 1992, el gobierno presentó un amplio Programa de Reconversión Para la Zona del Carbón, por medio del cual se había decidido enfrentar la crisis de la industria.
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