Mientras muchas personas que completaron su proceso de vacunación esperaban la puesta en marcha del Pase de Movilidad que les otorgaría mayores libertades en las comunas en Cuarentena y Transición, varios de los que estaban en calidad de «rezagados» lo tomaron como una motivación para inocularse. Un escenario que a los ojos de las comunidades médicas y científicas era visto con desconfianza, advirtiendo que esta medida del Gobierno no haría más que acrecentar las cifras de contagios.
Un análisis que es compartido por el Dr. Guillermo Cabrera-Vives, líder del Equipo de Proyecciones Covid-19 de la Universidad de Concepción. El ingeniero civil informático, en entrevista con Radio UdeC, sostuvo que «hay mucha gente que está vacunada, pero no inmunizada», lo que va a provocar que al disminuir las restricciones, se incremente la circulación del virus.
El director de la Unidad de Ciencia de Datos del Departamento de Ingeniería Informática comentó que el pase «apunta a un desconfinamiento que en la práctica sí o sí va a aumentar la tasa de contagio, aún cuando sea poco, la va a aumentar», agregando que «es una medida que tendría sentido si tuviésemos un número de contagiados más bajo».
Consultado sobre la situación sanitaria en que nos encontramos actualmente, el académico mencionó que «veníamos a la baja y se empezaron a desconfinar zonas, lo que mezclado con otras situaciones como el Día de la Madre, el 10% de la AFP y las elecciones, han hecho que haya aumentado el número de contagios».
«Deberíamos estar apuntando a medidas de confinamiento donde evitáramos la propagación del virus en este momento», enfatizó el investigador.
El modelo: proyectar en la incertidumbre
El Equipo de Proyecciones Covid-19 de la UdeC entrega informes semanalmente, con datos de las regiones de Ñuble, Biobío, y Metropolitana, además de valores a nivel nacional. Sus autores son enfáticos en señalar que «las proyecciones deben entenderse como modelos matemáticos que asumen ciertos supuestos, por lo que no pueden interpretarse como definitivas».
En Palabras de Cabrera-Vives, el modelamiento matemático empleado permite determinar cómo evoluciona la población en el marco de la pandemia, aunque ante nuevos eventos -como la implementación del Pase de Movilidad- se requiere incorporar ajustes.
«El modelo depende de un parámetro de contagio que vamos ajustando a medida que pasa el tiempo, entonces si hay una situación nueva o anómala que no conocemos, seguramente no le vamos a ‘apuntar’ bien, porque la tasa de contagio no fue modelada correctamente», sostuvo.
Cabrera-Vives señaló que la situación actual es preocupante, porque «el mensaje que transmiten las autoridades impacta en la tasa de contagio», por lo que acciones que sean interpretadas como escenarios de seguridad, pueden tener efectos contraproducentes.
Decisiones y consecuencias
Los investigadores que integran el Equipo de Proyecciones forman parte de la Mesa Social Covid-19 de la Región del Biobío, lo que permite que semana a semana se contacten con las autoridades locales y den cuenta de la información que van generando.
Sobre los distintos aspectos que se consideran al momento de tomar una decisión sanitaria, el académico expuso que existe evidencia internacional que demuestra que cuando se implementan medidas estrictas que repercuten en las actividades económicas y que buscan reducir los contagios -a la larga- tienen menor impacto negativo en el área financiera.
«Cada medida que tomemos se empieza a ver en los datos entre una y dos semanas después. Generalmente, después de 7 días se empiezan a ver los primeros indicios, pero no son suficientes como para modelar el impacto de manera matemática, después de dos semanas hay suficientes datos para ver cuál fue el impacto», concluyó el investigador.
Escucha aquí la entrevista completa: