La velocidad con las que han avanzado las labores de reconstrucción tras los incendios forestales constituye aún un tema abierto y perfectible, que incluso ha suscitado llamados de atención al Gobierno por parte de los gobernadores regionales de Biobío, Ñuble y La Araucanía. Para abordar estas oportunidades de mejora, dialogamos en Nuestra Pauta AM con Julián Corbett, encargado de reconstrucción del GORE Biobío, quien efectuó un repaso no solo de las iniciativas de recuperación surgidas desde la zona, sino que también de los planes de mejoramiento de los estándares de respuesta, infraestructura y equipamiento previos a la catástrofe.
Durante su paso por Nuestra Pauta AM, el encargado recordó los contenidos «Biobío se levanta», estrategia que busca complementar el plan de reconstrucción estatal a través de la inversión de $50 mil millones en torno a nueve líneas de trabajo.
Es en ese contexto que Corbett recalcó que el objetivo principal ha sido apoyar las labores del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) a través del monitoreo y, sobre todo, del suministro de información experiencial para indicar «qué acciones se pueden desarrollar de manera correctiva para aumentar la producción de viviendas».
En concreto, afirmó el encargado de reconstrucción, el GORE no solo ha propuesto al Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) acelerar la ejecución de las soluciones habitacionales ante la pronta llegada del invierno, sino que además comenzar, desde ya, el levantamiento paralelo de las viviendas definitivas.
Para aquellos afectados que hoy no poseen títulos de dominio vigentes -los que son necesarios para acceder a beneficios estatales-, Corbett aseguró que el GORE se encuentra trabajando en soluciones alternativas, las que serán dadas a conocer una vez que el Minvu entregue su «catastro detallado» este viernes 17 de marzo.
Lineamientos regionales
Consultado por las recientes críticas de los gobernadores de Ñuble, Biobío y La Araucanía por la ausencia de conexiones eléctricas y sanitarias en las viviendas de emergencia ya terminadas, el encargado de reconstrucción clarificó que el Ministerio del Interior y Seguridad Pública «ya se encuentra realizando acciones (…) para cubrir esa necesidad».
En cuanto a las líneas de trabajo dispuestas por el GORE Biobío, Corbett destacó aquella que busca «recuperar o fortalecer» las maquinarias municipales y de Bomberos en 12 de las comunas afectadas. Dentro de los beneficiarios también se encuentra la Corporación Nacional Forestal (Conaf), que sumará dos nuevos puestos de control móviles y seis vehículos para el ataque inicial y el combate de futuros incendios.
El encargado de reconstrucción del GORE Biobío también destacó la aprobación de $2 mil 900 millones para el desarrollo de la iniciativa «Transferencia reactivación productiva Biobío se levanta», que plantea estímulos económicos para las micro, pequeñas y medianas empresas afectadas en las comunas de Santa Juana, Nacimiento, Negrete, Mulchén, Quilleco, Yumbel, Arauco, Contulmo, Hualqui, Florida, Tomé y Penco.
A este último programa, afirmó Corbett, podría sumarse un nuevo plan orientado a quienes, luego del catastro, «no tendrán financiamiento» por parte del nivel central.
Finalmente, el encargado de reconstrucción se refirió a las líneas de restauración agroecológica, actualmente en elaboración junto con centros académicos de excelencia; de educación, que de manera colaborativa busca poner en marcha tanto los establecimientos damnificados durante la presente temporada como aquellos que no fueron repuestos tras el terremoto del 27 de febrero de 2010; y de reposición de la infraestructura de Agua Potable Rural (APR), que beneficiará principalmente a Santa Juana.
«Debemos trabajar primero en recuperar la habitabilidad, reponer los servicios y poner en funcionamiento las escuelas», apuntó Julián Corbett, lo que permitirá avanzar hacia otros proyectos de mediano plazo centrados en «mejorar el estándar» previo a los incendios.
Fotografía: Raphael Sierra / Diario Concepción