A pocos días del lanzamiento de «La sociedad impaciente», un análisis sobre la sociedad chilena ante el recambio político y la nueva Constitución; el doctor en Sociología, escritor y consultor privado, Eugenio Tironi, abordó los contenidos de su más reciente obra y proyectó, sobre la base de esas reflexiones, los actuales desafíos de los itinerarios constitucional y de Gobierno.

El columnista inició su intervención en Nuestra Pauta AM abordando el concepto central del texto, la impaciencia; fenómeno que, por una parte, relaciona con causas globales como los recientes procesos de secularización; con la pérdida de los relatos unificadores del siglo pasado; y con el desplome del «sueño meritocrático» y de la sensación de «progreso indefinido» otrora impulsada por el crecimiento económico. Amplificados por las redes sociales, estos y otros factores han asentado la tendencia «de querer todo ya» y «de tener poca tolerancia a la espera».

Por otro, lado, el académico sostuvo que el actual recambio generacional ha respondido también a otros procesos más bien nacionales, como es la prolongación «más allá de lo razonable» de la vigencia de la camada política de los baby boomers. 

Este conjunto de elementos, dijo, permitió el ascenso de Gabriel Boric a la presidencia, quien, para Tironi, ha demostrado patentes capacidades para adaptarse a las nuevas prioridades de la población. No obstante, amparar hoy su administración conllevaría dejar de lado los miedos asociados a esta nueva forma de gobernar y a las distancias, ya declaradas, respecto de los aportes efectuados por los políticos salientes.

Menos baby boomer

«Es una actitud muy millennial (…) que no tiene mucho temor al cambio», afirmó el doctor en Sociología respecto del tenor presidencial. A su parecer, ello es lo que hoy permite al Ejecutivo leer con mayor facilidad las coyunturas «de los tiempos de la impaciencia» y, a su vez, distanciarse de los liderazgos ejercidos por sus predecesores de la Concertación de Partidos por la Democracia y de Chile Vamos.

En esa línea, Tironi enfatizó en que «cabe preguntarse por qué llegamos a este Gobierno, qué representa y a qué aspira» en lugar de intentar forzar decisiones y comportamientos similares a los de la generación de los baby boomer. «Eso es lo que intento analizar en este libro», afirmó en alusión a los contenidos de «La sociedad impaciente».

Cambio y adaptabilidad

A pesar de los diversos tropiezos que han marcado este primer año de mandato, el especialista destaca como virtud la capacidad del Gobierno «de rearmarse en cuestión de horas» y de incorporar temas evitados por las nuevas generaciones, como es el caso del narcotráfico, la migración y la seguridad pública.

Esta capacidad de hacer concesiones, de dar giros en torno a las nuevas prioridades y de cerrar discursos como el de «los 30 años» también distanciarían a Boric del comportamiento demostrado por la Convención Constitucional, institución que, a juicio de Tironi, fue «indiferente» a la evolución de la agenda y terminó estancada en el «momento refundacional» posterior al 18O.

Por ello, para el consultor, será clave que el nuevo Consejo Constitucional, que inició sus labores este martes 6 de febrero, emule esas capacidades de recoger e incorporar «las lecciones» derivadas de la «desmesura» de la etapa anterior.

Conducción política de la crisis

En cuanto a los resultados que, de momento, ha dejado el proceso constituyente, el doctor en Sociología afirmó sentirse «orgulloso de lo que hemos logrado como sociedad y sistema político». Por ello, sus proyecciones ante esta segunda etapa son más bien optimistas.

«(La nueva Constitución) no va a quedar, quizás, en los anales de la historia (…) pero nos va a permitir reglamentar nuestra convivencia de forma legítima y por un largo periodo de tiempo», es parte de lo que prevé. Para que ello se concrete, dijo, el nuevo texto deberá hacerse cargo de los temas «de este siglo», como la descentralización, el cambio climático, la igualdad plena y la incorporación de los pueblos originarios.

Por todo lo mencionado, Tironi concluyó que esta forma de abordar «quiebres tan profundos como los de octubre de 2019» no posee mayores antecedentes a nivel mundial, lo que demuestra la capacidad de la clase política chilena de evitar las crisis de gobernabilidad y de resolver los dilemas de forma civilizada y sofisticada. «Habla muy bien de nuestro país», fueron sus palabras finales.

Revisa la entrevista completa con Eugenio Tironi aquí:

Fotografía: ICARE