Fueron 109 postulantes quienes se inscribieron a la primera versión del Desafío Conexión CMPC (DCC), programa dirigido a estudiantes de pre y postgrado de la Universidad de Concepción, en el marco de la Alianza de Colaboración Estratégica firmado con la empresa CMPC. Se trató de una de las actividades realizadas en conjunto durante 2020, que buscan favorezcan el desarrollo de la industria del futuro, la aceleración de talentos y el impulso a la innovación y el emprendimiento de base tecnológica universitaria.
El programa, que finalizó el viernes 18 de diciembre, fue ejecutado por Incuba UdeC y seleccionó a 31 alumnos y alumnas de seis facultades, quienes durante 15 semanas desarrollaron proyectos de innovación de rápida implementación, trabajando en conjunto con representantes de las filiales del grupo CMPC. La empresa presentó 12 desafíos, 11 de los cuales fueron abordados por equipos de estudiantes y sus sponsors, quienes presentaron soluciones innovadoras en áreas como seguridad, educación ambiental, automatización de sistemas, conectividad, accesibilidad de caminos y nuevos productos.
El Director de Desarrollo e Innovación de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo de la casa de estudios, Dr. Pablo Catalán Martínez, explicó que “la importancia del trabajo mancomunado entre universidad y empresa se debe a la conjugación del conocimiento que nace en cada una de ellas, en función de sus propias realidades y capacidades. La academia aporta conocimiento científico-tecnológico de alto estándar, mientras que la empresa aporta conocimiento que surge de la práctica, de su rutina diaria, teniendo claridad sobre cuáles son sus brechas y necesidades basadas en tecnología”. En este sentido, explica Catalán, “nace una oportunidad y espacio de interacción que deriva en soluciones de mayor impacto para procesos productivos, en función de un desarrollo sostenible”.
El gerente de Innovación de CMPC, Felipe Alcalde, explica que “buscábamos crear valor y creo que lo hemos logrado. Esta ha sido la primera versión del Desafío Conexión CMPC, y ojalá en un tiempo más veamos las historias de éxito de estas iniciativas, que pasen a ser parte del quehacer de nuestra empresa y para los estudiantes quizás un emprendimiento”.
De la teoría a la práctica
Para los estudiantes, el paso por DCC significó acercarse al mundo laboral, pudiendo demostrar su capacidad creativa en la resolución de problemas que, en las aulas, no alcanzan a dimensionar plenamente. “Nos llamó la atención que una empresa tan grande como CMPC estuviera interesada en dar oportunidades a estudiantes, a personas que aún no están tituladas. Es una oportunidad que no pensé que iba a tener tan temprano”, explicó Bastián Medina Rosales, quien cursa 5° año de Ingeniería Civil Eléctrica. “Incluso pudimos visitar el terreno de la operación y conocer y conversar con las personas que trabajan en ella, también los sponsors nos dieron apoyo y conocimiento sobre la operación de la empresa”, destacó.
Bastián trabajó junto a Lucas Villalobos Contreras, estudiante de Ingeniería Civil Mecánica en el proyecto “Abatir y levantar estacas de los camiones madereros”, un reto que les permitió mejorar las condiciones de seguridad de los trabajadores. “Se buscó generar una solución automatizada de una labor que actualmente se hace en forma manual, en donde pueden haber accidentes graves”, definió Lucas. El equipo se centró en conocer las actividades auxiliares de la conducción, que tienen que ver con la carga y descarga de camiones, enganche de carros, muchas de ellas calificadas como de alto riesgo por los operadores en faena. “Estando disponible la tecnología para evitar estos peligros, es importante para nosotros poder ayudar a implementarlas”, apuntó Lucas, y agregó: “Creo que durante muchos años las universidades no ha tenido una conexión con el mundo empresarial y eso es lo que plantea DCC. Es algo que se tiene que incrementar mucho más, porque la UdeC desarrolla tecnologías, pero queremos avanzar para que sean soluciones reales y tangibles dentro de las empresas”.
Por su parte, Catalina Bello Carrasco, egresada en noviembre pasado de Ingeniería Civil Metalúrgica, tras conocer el programa en una charla convenció a sus compañeras de carrera para inscribirse juntas. “Donde más he aprendido sobre innovación ha sido en el DCC”, enfatizó. Su proyecto en particular busca atender no solo las necesidades de la compañía, sino ayudar a las comunidades que viven en torno a las faenas. “Los caminos por los que transitan los camiones de CMPC presentan diferentes tipos de deterioro, lo que afecta a una gran cantidad de vecinos que viven a los costados de estos caminos. Hay casas, escuelas, postas, son personas que no pueden desplazarse porque los caminos están muy deteriorados”, detalló.
Con el análisis realizado por este equipo, CMPC podrá pasar de una reacción al problema a la toma de decisiones anticipadas. Desarrollaron un sistema de gestión especializado que permite caracterizar las rutas, ofreciendo información sobre su uso y condiciones, de manera de organizar las mantenciones, reparaciones o rehabilitaciones. “Este sistema de gestión cuenta con indicadores objetivos y estandarizados, para mantener la operación logística de la empresa. Además, hemos podido avanzar en la detección del deterioro de los caminos, a través de inteligencia artificial en base a grabaciones”, indicó.