La discusión política marcó la segunda jornada del Encuentro Regional de Empresas (Erede), con la presencia de cuatro candidatos presidenciales: Marco Enríquez-Ominami, José Antonio Kast, Yasna Provoste y Sebastián Sichel, quienes participaron del panel «Grandes transformaciones».
Junto con criticar la ausencia de Gabriel Boric, los presidenciables abordaron aspectos relacionados con el quehacer económico del Biobío, en una instancia moderada por el comunicador Juan Manuel Astorga.
Marco Enríquez-Ominami se refirió a los efectos «demoledores» de la pandemia en la región e indicó que la «paz social» es necesaria para el funcionamiento de la actividad económica.
José Antonio Kast, por su parte, planteó la urgencia de «reglas claras, estado de derecho, normas laborales claras y bajar la carga tributaria», lo que ayudaría tanto a las pymes como a las grandes empresas. Su propuesta, señaló, es una «revolución tributaria».
En tanto, Yasna Provoste sostuvo que es clave «una macroeconomía responsable que nos permita tener acceso a financiamiento para los grandes proyectos (…) tenemos un plan integral para que puedan ser aprobados de manera más expedita, velando siempre por los estándares ambientales y sociales».
Para Sebastián Sichel, uno de los desafíos fundamentales que la región retome su impacto en la economía nacional, ya que actualmente su aporte al PIB es del 8%, lejos del 12% que registraba hace cincuenta años. Su propuesta, apuntó, estará enfocada en la innovación, en manufactura avanzada y en «reglas más claras» para retomar el crecimiento.
Violencia en Arauco
Otro de los panelistas de esta jornada fue el Gobernador de Biobío, Rodrigo Díaz, quien abordó el proceso de implementación de este nuevo cargo, además de la descentralización, desarrollo sustentable y el diálogo como eje principal para avanzar hacia una mejor calidad de vida.
Al término de esta presentación, y consultado por los nuevos atentados que se han registrado en la Provincia de Arauco, Díaz rechazó el uso de la violencia como acción política y propuso que el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, y el subsecretario de dicha cartera, Juan Francisco Galli, sean interpelados por este conflicto en la Cámara de Diputados.
La autoridad regional dijo que “lo que a mí me ha tocado ver en el territorio, conversando con comuneros, vecinos, trabajadores, pequeños empresarios, alcaldes y concejales, es que hay una situación de permanente temor por la inacción del Estado. No están haciéndose políticas públicas, no hay diálogo ni acompañamiento a las personas”.
