Las estadísticas sobre donación y trasplantes de órganos en Chile no son nada alentadoras. A la fecha, a nivel nacional, se contabilizan alrededor de 100 donantes efectivos, cifra que no alcanza a cubrir la demanda de las más de 2.300 personas que se encuentran en lista de espera, muchas de ellas con la esperanza de recibir nuevos órganos o tejidos que les permita seguir viviendo o mejorar su condición de salud.
La negativa de las familias de no respetar la decisión de sus seres queridos que manifiestan su voluntad de querer ser donantes, es el principal problema que impide incrementar las tasas de donación a nivel nacional, según reconoció el médico jefe de la Unidad de Procuramiento del Hospital Guillermo Grant Benavente, Jaime Lastra.
“Han sido siete las comunicaciones de donaciones que hemos tenido, o sea, siete pacientes que han tenido la posibilidad de ser donantes y sólo en tres de ellos sus familiares han ratificado la voluntad de donar”, reveló el facultativo, en relación a lo sucedido este año sólo en el Servicio de Salud Concepción.
“No podemos compararnos con el año anterior por la pandemia, pero si miramos un poco más hacia atrás, el 2016, que fue el mejor en cuanto a donaciones, en que tuvimos 11 casos, si manejamos estas cifras, estamos muy por debajo de lo que debiésemos tener de pacientes donantes. El desafío, por cierto, es aumentar esa cifra”, subrayó.
El profesional hizo un llamado a las familias, para que conversen el tema y lleguen a acuerdos en el sentido de respetar la voluntad de quienes manifiesten la intención de donar sus órganos al momento de morir.
Trasplantado de corazón
Marcelo Villarroel, casado y padre de dos hijos, a sus 48 años tuvo otra oportunidad de seguir con vida, gracias al nuevo corazón que recibió en mayo de 2021. Esperó cerca de dos años por un trasplante, luego que en 2019 le fuera diagnosticada una cardiopatía dilatada, misma enfermedad por la que, en noviembre de 2020, falleció su hermano, quien al igual que él, esperó por un nuevo órgano. Una historia con final feliz y con sentimientos encontrados.
“Yo estoy agradecido de la familia que me dio la oportunidad de vivir. Sin ellos yo no hubiera estado aquí. En este lapso, yo tenía un hermano que tenía la misma enfermedad y falleció esperando un trasplante”, contó.
Según Marcelo, son muchas personas que mueren esperando un órgano e insistió en la necesidad de sensibilizar a la población, para que en los casos donde se manifieste la voluntad de ser donante, los familiares respeten esa decisión.
Familia de donante
Desde la otra vereda, Ingrid Ortega, habitante del sector Candelaria de la comuna de San Pedro de la Paz, accedió a entregar su testimonio tras la abrupta partida de un hijo a inicios de septiembre, a causa de una afección cardíaca. En su caso, su primogénito había manifestado en vida su voluntad de ser donante, decisión que la familia respetó.
“Él era donante, pero yo no lo sabía. Su familia lo sabía, pero yo no, porque quería que me entregaran a mi hijo tal cual lo había llevado, peleé por eso, lloré hasta que me cansé, pero después entendí su generosidad”, expresó la mujer de 68 años.
Este lunes 27 de septiembre se conmemorará un nuevo “Día Nacional del Donante de Órganos y Tejidos del Cuerpo Humano en Chile”, fecha que busca poner en relieve la importancia de este acto que permite mejorar la salud de pacientes que requieren un trasplante para corregir disfuncionalidades de distinto tipo.