Conocer cómo están enfrentando los trabajadores y trabajadoras la incertidumbre por el retorno presencial a las actividades y la percepción de la actual etapa de la pandemia, caracterizando su impacto en la salud mental y la percepción de riesgo, fueron los objetivos de un estudio de la Mutual de Seguridad que se aplicó a 738 personas con contrato formal en organismos privados y públicos, residentes en las Zonas Sur, Norte y Región Metropolitana.
Los hallazgos de la investigación dan cuenta que durante la pandemia, la mayoría de las personas ha experimentado estrés, cansancio o agobio. Sensaciones que persisten en la actualidad a pesar del desconfinamiento y relajo en las medidas de restricción sanitarias.
Según Ignacio Puebla, psicólogo de la Mutual de seguridad, el 43% de los trabajadores aún se siente estresado.
La crisis sanitaria no ha impactado a todos por igual. Según el estudio, las mujeres se han visto más perjudicadas en este período, particularmente por la doble carga que han debido asumir, haciéndose responsables de las labores del hogar, el cuidado familiar y el trabajo. Esto ha afectado negativamente el bienestar de las trabajadoras.
Otro resultado que evidencia una disparidad es que un 23,5% de las mujeres que tiene una relación con el trabajo presencial o el trabajo híbrido, ha experimentado irritación, mal humor y frustración. En paralelo a esta realidad, las sensaciones que afirman sentir los trabajadores de sexo masculino son diametralmente opuestas: el 33,2% ha sentido motivación, entusiasmo, confianza, en comparación con las mujeres que sólo llegaron a un 23,4%
Por otra parte, el 32,5% de los hombres declaran sentirse optimista y esperanzado en la etapa actual que estamos viviendo de la pandemia en contraste con las mujeres que solo alcanza un 19,5%.
«Las brechas de género ya estaban presentes y la pandemia vino a sacarle el velo a ciertos problemas que ya existían», explicó Puebla.
Experiencia y valoración de modalidades de trabajo
Al ser consultados sobre la modalidad en que se desempeñan actualmente, el 78% de las personas declara estar completamente presencial. En tanto, sólo un 22% trabaja de manera remota, realidad que se da con mayor incidencia en los segmentos socioeconómicos medio y alto.
Al preguntarles sus preferencias, quienes seleccionaron formato presencial argumentaron que sus razones eran por el tipo de labores que realizan, a lo que se suman atributos como salud mental, sociabilidad y comodidad. En tanto, los que seleccionaron labores híbridas justificaron su opción en reducir riesgos de contagio y mantener el cuidado familiar, salud metal, sociabilidad y comodidad. Finalmente, quienes eligieron teletrabajo precisaron que es por prevenir el Covid-19, tal como explicó el especialista.
El uso de mascarillas en transporte público (72,2%) y lugares cerrados (70,7%), junto con el lavado de manos (71,3%), son parte de las principales medidas de prevención que los trabajadores desearían mantener.
Además, respecto de las acciones que se consideran poco efectivas y deberían dejar de practicarse, aparecen el uso de mascarillas en espacios abiertos (39,7%) y el monitoreo de la temperatura al ingresar a lugares cerrados (35,1%).
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