Más de 150 milímetros de agua han caído en la Región del Biobío, siendo las precipitaciones más importantes desde 2006 en la zona central. Lo anterior ha dejado un centenar de personas y viviendas afectadas por el desborde de ríos, corte de caminos, daños de infraestructura crítica y personas anegadas en albergues de emergencia. A raíz de esta situación, la Seremi de Desarrollo Social y Familia comenzó el proceso de aplicación de la Ficha Básica de Emergencia (FIBE).
Durante este primer día, hubo despliegue por el territorio para catastrar a las familias afectadas en las comunas de Mulchén, San Rosendo, Curanilahue, Tomé, Los Álamos, Cabrero, Lota, Curanilahue y Nacimiento. Se aplicaron y digitalizaron 62 Fichas Básicas de Emergencia, cubriendo 250 personas.
El seremi de Desarrollo Social y Familia, Hedson Díaz, informó que “este instrumento permite catastrar el nivel de daño de la vivienda y de los enseres. En ocho comunas ya estamos aplicando la FIBE y diariamente entregaremos un balance”.
“Esta FIBE permite acceder a todos los beneficios del Estado, además de georreferenciar la vivienda, saber la composición familiar y, por lo tanto, conocer el daño de la catástrofe”, detalló el seremi.