La Delegada Presidencial de la Región del Biobío, Daniela Dresdner, explicó los principales aspectos del Plan Buen Vivir, anunciado durante la noche de lunes por la ministra Izkia Siches, que considera el estado de emergencia para las provincias de Arauco y Biobío y toda la Región de la Araucanía.
Tras encabezar una reunión de coordinación con los secretarios regionales ministeriales de Gobierno, Obras Públicas, Agricultura, Transportes, Vivienda, Educación, Salud y Desarrollo Social, Dresdner señaló que el estado de emergencia es un tercer eje de un plan que incluye medidas en ámbitos como restitución de tierras e institucionalidad y parlamentos territoriales e inversión.
La delegada recalcó que el objetivo en materia de seguridad es «asegurar las rutas, los lugares estratégicos para el suministro y el funcionamiento de estos territorios».
En esta línea, destacó que el trabajo será coordinado no sólo con las fuerzas militares, encabezadas por el contraalmirante Jorge Parga, jefe de la Segunda Zona Naval; también con las policías.
Este trabajo coordinado entre los distintos órganos del estado, agregó, considera el respaldo al actuar de las fuerzas en el territorio.
Más tarde, la delegada sostuvo una reunión con el contraalmirante Parga y el general Juan Pablo Caneo, jefe de la Octava Zona de Carabineros, además de los delegados provinciales de Arauco y Biobío, Humberto Toro y Paulina Purrán.
El contraalmirante Parga indicó que, a la espera de la publicación del decreto en el Diario Oficial, «necesitábamos coordinar las acciones que vamos a efectuar para materializar el estado de excepción constitucional».
El general Caneo, por su parte, entregó más detalles sobre la coordinación y agregó que «el despliegue operativo que tenemos es suficiente para los desafíos en este momento».
Finalmente, Daniela Dresdner reiteró que «tenemos que avanzar en la persecución del crimen organizado, que es parte importante del conflicto que tenemos en la zona (…) Aparte de estas medidas, vamos a impulsar cambios legislativos para mejor persecución del crimen organizado y leyes de inteligencia, porque creemos que esto no se puede reducir a la llamada violencia rural, estamos hablando de algo mucho más profundo y complejo».
