Con el Presidente Gabriel Boric y las máximas autoridades de los poderes Judicial y Legislativo en la testera del ex Congreso Nacional, el Consejo Constitucional dio inicio a su labor.
La primera parte de la sesión fue encabezada en calidad de presidente provisional por el consejero Miguel Littín (PS), integrante de mayor edad del órgano redactor. En su alocución, el cineasta llamó a «ser dignos en la tarea» e invitó a «jurar pensando en Chile, en las mujeres, en los hombres, en los campesinos, en los obreros, en la clase media. En la gente que confió en nosotros y nos entregó una misión».
A diferencia de lo sucedido en julio de 2021 durante la primera sesión de la Convención Constitucional, en esta oportunidad el Presidente de la República no sólo fue invitado al hito inicial, sino que tuvo la posibilidad de dirigirse a la audiencia.
Gabriel Boric comenzó relevando la labor de la Comisión Experta y la elaboración del anteproyecto, cuyos artículos fueron aprobados de manera transversal.
De cara a la nueva etapa del proceso, el mandatario llamó a tener presente «lo mejor de nuestras tradiciones democráticas».
Luego de la intervención presidencial vino la aceptación del cargo a los consejeros y consejeras. Uno de los principales temas de interés pasaba por la situación de Aldo Sanhueza, representante de la Región del Biobío quien presentó su renuncia antes de asumir tras conocerse su formalización por ofensas al pudor en 2019.
El Tricel declaró inadmisible esa renuncia por no haber asumido aún el puesto. Sanhueza -quien se encontraría fuera de Chile- no asistió a la ceremonia y no será considerado como integrante del Consejo Constitucional.
Presidenta republicana y vicepresidente socialista
Con los 50 consejeros y consejeras en sus cargos, el órgano debía elegir a sus máximas autoridades. En votación única, y evidenciando la correlación de fuerzas, fueron elegidos los abogados Beatriz Hevia (Partido Republicano, Región de Los Lagos) y Aldo Valle (IND-PS, Región de Valparaíso), como Presidenta y Vicepresidente del Consejo Constitucional.
En sus primeras palabras ante el Pleno, Beatriz Hevia agradeció a los representantes de los tres poderes del Estado y a la Comisión Experta. Respecto del trabajo en esta etapa, adelantó que el objetivo será «plasmar la voluntad popular en el texto».
Junto con reflexionar acerca de la crisis «económica, política, social y moral» que a su juicio vive el país, Hevia manifestó esperar que los cinco meses de trabajo del órgano redactor «no sean un capítulo adicional en esta larga y compleja serie, sino que se conviertan en el capítulo final de esta crisis».
En tanto, Aldo Valle invitó a sus pares a «no asustarse por las diferencias» y «estar dispuestos a dejarnos persuadir por el mejor argumento».
«Espíritu de diálogo»
Al término de la ceremonia, Paloma Zúñiga (RD), representante de la Región del Biobío, destacó que «el espíritu de diálogo está primando y los discursos estuvieron en la línea de lo que, entiendo yo, busca la mayoría de consejeras y consejeros».
La consejera valoró la composición de la Mesa Directiva y adelantó el trabajo que desarrollarán junto a su equipo para mantener el vínculo con la ciudadanía e informar los avances del proceso.
Si bien desde los consejeros republicanos no hubo una vocería oficial, el presidente de la colectividad, Arturo Squella, llamó a «no escandalizarse» cuando los distintos colectivos busquen modificar elementos del anteproyecto, señalando que «ese es el ejercicio que seguramente están haciendo todas las bancadas».
El hito de instalación del Consejo Constitucional finalizó con la entrega formal del anteproyecto por parte de la Comisión Experta. Su presidenta y vicepresidente, Verónica Undurraga y Sebastián Soto, expusieron los principales contenidos del documento.