El comienzo de nuevos talleres de huertas comunitarias en sedes sociales y centros de salud, y el cierre de la cuarta versión del Curso Básico de Apicultura, son hitos con los que la Municipalidad de Chiguayante inicia un nuevo año en Agroecología Urbana.
Al respecto, el alcalde de Chiguayante, Antonio Rivas, dijo que “somos una comuna urbana, pero eso no impide sacar adelante estas iniciativas por la importancia que tienen en el cuidado medioambiental, en la salud y la soberanía alimentaria de la comunidad. Esto nos ha valido el reconocimiento del ministerio de Agricultura como una de las comunas más activas del país en estas materias, y ese orgullo se lo debemos a nuestros vecinos”.
En el caso de los talleres de huertas, son 130 las personas inscritas que participarán de las clases teóricas y prácticas en cinco sedes vecinales, además de la Granja Agroecológica, Centro de Salud Integral Ruka Antu y en el Centro de Salud Mental de la comuna.
En lo que dice relación con apicultura, recientemente se efectuó la ceremonia de cierre y entrega de diplomas para 20 participantes de la cuarta versión del curso básico, que busca formar nuevos apicultores y fomentar emprendimientos locales.
Lo anterior cobra especial relevancia, ya que este curso apunta al fortalecimiento de un rubro altamente afectado tras los últimos incendios forestales del verano y por la relevancia del rol de la abeja en la biodiversidad y polinización.
No obstante que se trata del cierre de un programa puntual, esta capacitación sella una serie de actividades ejecutadas dentro del año apícola 2022 – 2023. Entre ellas, cursos de especialización en apicultura y subproductos, seminarios, mesas de trabajo y orientación o asesoría en esta materia a pequeños emprendedores.
Vermicompostaje
El programa de Agroecología municipal ha ideado un sistema de vermicompostaje comunitario que se complementa a las actividades de huertos, con la instalación de vermicomposteras en la Granja Educativa y en la junta de vecinos de Villa Producción y Comercio, con capacidad para 1 tonelada y 700 kg. respectivamente.
Próximamente, se dará lugar a la etapa de cosecha de humus, que se produce tras la acción de lombrices californianas sobre residuos orgánicos cifrados, hasta la fecha en más de 700 kg., con lo que se reduce la cantidad de basura generada en los domicilios, lo que tiene un impacto en el cuidado medioambiental.