Ante la caída del gobierno afgano como consecuencia de la toma del poder por los talibanes y las escenas de caos en el aeropuerto de Kabul con miles de personas tratando de huir del país, Agnes Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional, manifestó que “lo que estamos presenciando en Afganistán es una tragedia que se debería haber previsto y evitado. Si no hay una acción rápida y decisiva de la comunidad internacional, no hará sino complicarse aún más. Miles de personas afganas en grave peligro de sufrir represalias a manos de los talibanes —desde personal académico hasta periodistas, activistas de la sociedad civil y defensoras de los derechos humanos— podrían verse abocadas a un futuro muy incierto”.
Callamard agregó que “los gobiernos extranjeros deben tomar todas las medidas necesarias para garantizar una salida segura de Afganistán a todas las personas que están en el punto de mira de los talibanes. Esto incluye expedir visados, ofrecer apoyo a las evacuaciones desde el aeropuerto de Kabul, proporcionar plazas de reubicación y reasentamiento, y suspender todas las deportaciones y devoluciones. Pedimos a Estados Unidos que garantice seguridad permanente en el aeropuerto mientras se llevan a cabo las evacuaciones”.
“Ante la nueva y cruda realidad que debe afrontar la población afgana, el Consejo de Seguridad de la ONU también debe aprobar una resolución de emergencia para pedir a los talibanes —que ya controlan en la práctica el país— que respeten el derecho internacional de los derechos humanos, protejan a la población civil y pongan fin a los ataques de represalia mientras se siguen negociando los acuerdos para la transición”, finalizó la secretaria general de Amnistía Internacional.
Las consecuencias
Miles de habitantes de Afganistán que temen la vuelta al régimen talibán intentan huir del país por el Aeropuerto Internacional Hamid Karzai de Kabul. Están circulando vídeos en redes sociales donde se ven cientos de personas cruzando la pista a la carrera mientras soldados estadounidenses hacen disparos de advertencia al aire, una multitud intentando abrirse paso a empujones por la escalerilla de un avión y decenas de personas enganchadas a los laterales de aviones que intentan despegar.
Según ha declarado la autoridad aeroportuaria, se han suspendido todos los vuelos comerciales. El aeropuerto de Kabul estaba abarrotado la noche del domingo, según informes de prensa, con más de 2.000 personas intentando salir del país en vuelos comerciales.
De acuerdo con la información recibida, al menos cinco personas perdieron la vida en el aeropuerto de Kabul cuando cientos de personas intentaron entrar en los aviones a la fuerza. No está claro si las víctimas murieron por disparos o en una estampida. Tropas estadounidenses controlan actualmente el aeropuerto y supervisan las actividades en curso para evacuar a nacionales de su país.