Una vez más, después de la expedición Atacamex de 2018, los científicos del Instituto Milenio de Oceanografía (IMO) y la Universidad de Concepción accederán a lo más profundo de la Fosa de Atacama, a más de 8 mil metros de profundidad. El gran hito es que en esta ocasión serán parte de la primera expedición tripulada al mítico punto frente a la costa chilena. La nueva travesía, llamada Atacama Hadal, surge de una invitación del explorador y empresario estadounidense Víctor Vescovo.
Vescovo es pionero de la exploración de las mayores fosas oceánicas del mundo, habiendo sido el primer ser humano en visitarlas en persona. En esta oportunidad, pretende hacer lo propio en la Fosa de Atacama, para lo que ha invitado al IMO y -muy especialmente- a su director, Osvaldo Ulloa, a sumarse a esta expedición.
En entrevista con Radio UdeC, el Dr. Ulloa detalló cómo surgió este nuevo desafío.
Durante la primera aventura, en 2018, el equipo del Dr. Ulloa usó un vehículo autónomo no tripulado para hacer estudios en las aplastantes profundidades de la Fosa, un hito que ubicó a la oceanografía chilena como referente en la exploración de los océanos a nivel mundial. Gracias a esta hazaña lograron recolectar y muestrear diferentes especies inéditas hasta la fecha.
Según Ulloa, “gracias a Atacamex conseguimos sumar importantes descubrimientos sobre nuestro fondo marino, incluyendo información muy valiosa sobre las propiedades físicas y químicas del agua en cada una de sus capas. Del mismo modo, hemos obtenido datos sobre el ADN ambiental, así como imágenes únicas de organismos que habitan en lo más profundo”.
Por lo anterior, el investigador comentó que la nueva expedición contempla grades desafíos.
La profundidad de la Fosa de Atacama en primera persona
La nueva expedición Atacama Hadal tiene el potencial de ir mucho más lejos en el entendimiento del lecho marino más hondo de la costa occidental suramericana.
Para el IMO, el principal objetivo de esta expedición es mapear el fondo marino para determinar el lugar óptimo donde instalar los sensores de su futuro Proyecto IDOOS. En este sentido, cabe recordar que IDOOS, adjudicado en el Concurso FONDEQUIP 2020, pretende establecer el primer sistema de observación anclado en el océano profundo, incluyendo la Fosa de Atacama, para estudiar tanto la estructura y variabilidad temporal de las condiciones físicas, geoquímicas y biológicas presentes en la zona, como la deformación del fondo marino con el transcurrir del tiempo.
Este trabajo interdisciplinar -que une la Geofísica con la Oceanografía- permitirá detectar, cuantificar y comprender diferentes procesos que tienen lugar en estas grandes profundidades oceánicas. Adicionalmente, aportará la base científica futura que podrá utilizarse tanto como piedra angular para el establecimiento de un hipotético Sistema Nacional de Observación para el Cambio Climático -fundamental para la protección del ecosistema marino- como para implementar un eventual sistema de alerta temprana de terremotos y tsunamis, el cual permita estudiar el origen de éstos, cuestión fundamental para el conocimiento de este fenómeno tectónico característico de nuestro país.
Esta expedición será registrada por el mismo equipo cinematográfico responsable del documental Atacamex, liderado por Julián Rosenblatt, esperando con ello difundir una nueva hazaña para la ciencia chilena, tal como lo indicó el Dr. Ulloa.
Atacama Hadal cuenta con el apoyo del Ministerio de la Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, así como con el respaldo de la Universidad de Concepción y el patrocinio de Lotería Chile.
Escucha aquí la entrevista completa: