Pasadas las 18:00 horas (huso horario de Chile) del sábado 27 de julio, el básquetbol 3×3 empezó a pavimentar su camino a un inédito título en la Liga de las Naciones sub-23 de América, específicamente en la quinta fecha que se jugó en Ciudad de México.

Al frente estaba el representativo de las Islas Caimán, al que los nacionales superaron sin complicaciones por 21-6. En dicho cotejo, el gran responsable de que la selección chilena de la especialidad empezara a tomar confianza para el resto de la jornada fue el estudiante de Pedagogía en Educación Física de la Universidad de Concepción, Michael Rivera Bustamante.

Chile liquidó el partido por 21-6 cuando aún restaba 01:50 en el cronómetro (se juega un total de diez minutos o hasta que algún equipo llegue a 21 puntos). De esas 21 unidades, Rivera fue el máximo goleador de la escuadra nacional con nueve puntos. Cabe recordar que cada tiro considerado doble en el 5×5 vale un punto en el 3×3 y que los tiros desde el perímetro encestados valen dos unidades. Rivera anotó cuatro tiros de 1 punto, tres tiros libres y un tiro de 2 puntos.

Lo que venía a continuación eran palabras mayores: Estados Unidos, equipo al que Chile nunca había derrotado, era el obstáculo para llegar a la final. Chile tomó la ventaja desde un inicio y se adelantó 4-1, con un punto de Rivera incluido. Un par de minutos después el score estaba 6-4 y Rivera se despachó con un tiro perimetral para decretar el 8-4.

Luego marcó para el 9-5. Hasta 13-5 logró estar arriba Chile. Tres puntos consecutivos de los estadounidenses fueron interrumpidos por otra conversión de Rivera. Con el 17-10 para la selección nacional, Estados Unidos aceleró y marcó cinco puntos en fila. Un punto de Gabriel Soto ya no dejó tiempo para una remontada norteamericana, aunque un lanzamiento de larga distancia final estableció que Chile ganara por apenas una unidad: 18-17.

En la final esperaba Puerto Rico, que se puso arriba 3-1. Rivera descontó y dos ofensivas más adelante le dio la primera ventaja a Chile por 4-3, dando paso al vendaval nacional que sacó una ventaja de 10-3. Tres puntos consecutivos de los puertorriqueños pusieron algo de suspenso. Ahí apareció nuevamente el tiro perimetral de Rivera para un tranquilizador 12-6.

El triunfo de Chile estaba muy cerca. Se acababa el tiempo y con el 19-16 ya eran campeones. Para no dejar dudas, un tiro perimetral contra la chicharra de Vicente Schulz señaló el 21-16 para la primera corona nacional en la sub-23, con un estudiante de la Universidad de Concepción como integrante del histórico equipo.

Información: Noticias UdeC