Segundos finales del tercer cuarto. Arriba el local por dos puntos. Alejandro Vergara, gran figura del CD Las Ánimas de Valdivia, encuentra destapado a Diego Low. El capitán UdeC, Diego Silva Campos, no puede evitar el tiro de tres. El balón no entró, Carlos Milano bajó el rebote, se la entregó a Silva, que rápidamente levantó la cabeza y lanzó antes de llegar a la mitad de cancha.
Apenas salió el balón de sus manos, sonó la chicharra. Sebastián Carrasco intuía lo que podía pasar y miraba expectante mientras se acercaba a su compañero. La pelota siguió su curso glorioso, pegó en el tablero y cayó por la red. Triplazo del capitán y Basket UdeC se va con una importante ventaja psicológica —y de un punto— a enfrentar el último cuarto.
Más allá de esa jugada, el capitán analizó lo que fue el periplo valdiviano, comentando que en el juego tres —disputado el lunes 5 de junio— el partido se abrió un poco más temprano y lo pudieron manejar de mejor forma.
“Sabíamos que iba a ser un poco distinto, porque ellos saldrían al todo o nada, pero también tenían la presión de alargar la serie. Controlamos todo el partido, si bien estuvimos abajo en algunos momentos, no perdimos nunca la cabeza, no nos echamos a morir por nada; el público tampoco nos sacó del partido, que son todas esas cosas que pueden influir en un juego donde vas abajo y de visita. Eso es lo que más rescato, que pudimos controlar esas ansias y esa desventaja que enfrentamos”, precisó el capitán.
Silva también detalló que contaron con muy buenas ofensivas y decisiones acertadas, siempre buscando al jugador que tenía la ventaja. “Estoy muy contento por llegar a una tercera final consecutiva. Muy feliz por cada compañero, estamos muy claros en el rol de cada uno y eso se ve demostrado cada minuto en cancha. Ahora solamente a pensar en la final”, dijo.
Cabe destacar que Silva terminó con 18 puntos, 6 asistencias y 2 rebotes, siendo el máximo triplero del partido con 4 conversiones en 6 intentos (66%).
El MVP del partido y el que puso la daga final
Antes de ese triple de Silva, la UdeC caía por cinco unidades en el Coliseo Antonio Azurmendy Riveros. Saque de fondo para la visita con la chicharra por sonar y Milano se inscribió con un triple crucial.
El llanero no dudó y acertó un tiro que está lejos de ser su especialidad, enmendando el rumbo universitario. Respecto al hecho de alcanzar una nueva final, Milano señaló que es un momento grandioso llegar allí. “Han sido sacrificios muy duros en lo personal desde que llegué acá el año 2017, estar viviendo este momento tan lindo en la Universidad de Concepción, que acá en Chile me ha permitido jugar baloncesto profesional, es impagable”.
Reconoció que fue una serie difícil. “Ellos tienen muy buenos jugadores, pero nos preparamos muy bien para este desafío; ahora tenemos tres semanas para poder descansar y recuperar a los jugadores que tenemos lesionados. Ojalá Luzcando llegue bien a la final. Esperamos rival y ante el que venga tendremos que salir a jugar duro como lo hemos hecho toda la temporada”, cerró.
Carlos Milano anotó 15 unidades, bajó 10 rebotes y asistió 5 veces, siendo elegido el MVP del partido. Además, recuperó 3 balones y obtuvo un 70% de efectividad en tiros de cancha.
74-74 el score con 05:12 por jugar. De ahí, una espectacular racha de 8-0 para la UdeC. Luego un descuento del local y un libre de Bowman dejaban todavía abierto el partido. En ese momento, desde larguísima distancia, Sebastián Carrasco anotó el bombazo que cerró el match. Con 57 segundos por jugar, la ventaja era de 10.
El estudiante de Kinesiología UdeC se matriculó con 11 puntos, 7 asistencias y 2 rebotes, a sabiendas de que repetir sus 26 unidades y 13 asistencias del juego 3 era impensado. Sin duda, una inyección anímica de cara a la final de la Liga Mundo by Cecinas Llanquihue.
Sobre el significado de definir por tercera vez el torneo más prestigioso del básquetbol nacional, el ancuditano manifestó que es “una alegría tremenda, lo veníamos buscando. Las Ánimas hizo un muy buen papel en estos cuatro partidos, donde nos ganaron el primero en la Casa del Deporte. Mantuvimos la cabeza fría y creo que es ahí donde se ve a los grandes campeones. Estuvimos muy claros en los partidos siguientes. Fueron muy apretados, pero estuvimos tranquilos y pudimos cerrarlos en el último cuarto, así que muy contento porque demostramos que somos un gran equipo al que nunca hay que subestimar”, cerró.
Por último, consignar que la final se jugará al mejor de siete encuentros. La UdeC contará con la ventaja de la localía por haber ganado la fase regular. El rival será Colegio Los Leones de Quilpué o el CD Valdivia, cuya serie va 2-1 en favor de los últimos finalistas. Los dos primeros juegos están programados, cualquiera sea el rival, para el 1 y 2 de julio en la Casa del Deporte.
Información: Noticias UdeC
Fotos: Carlos Ávalos