A raíz de la solicitud de quiebra presentada por la empresa constructora Claro Vicuña Valenzuela el pasado viernes, el seremi de Obras Públicas del Biobío sostuvo una reunión para abordar los efectos y medidas a adoptar ante la paralización la construcción del enlace con la avenida Chacabuco del Puente Bicentenario. Tras el encuentro, se acusó a la empresa de un trato «irresponsable», a la vez que se detalló que el término del contrato ya se encuentra en trámite, para así acelerar el proceso de liquidación y readjudicación.
El diálogo fue solicitado por el jefe comunal de Concepción, Álvaro Ortiz Vera, quien calificó como «lamentable» la situación, dado que el costo original de la conexión ascendía a más de $24 mil millones, de los que $8 mil millones ya fueron anticipados a la compañía para dar inicio a los trabajos.
Específicamente, Ortiz criticó que al momento en que Claro Vicuña Valenzuela presentó su solicitud de quiebra en enlace del Puente Bicentenario solo contaban con un 0,38% de avances, cuando lo esperable era un 2%.
Cabe recordar que esta misma empresa posee otros contratos con el Estado, por obras como el tramo 3 del eje Colón en Talcahuano, el puente Arturo Prat de Curanilahue y dos complejos habitacionales en San Pedro de la Paz y Hualpén. Con todos los procesos que «establece la ley», dijo Ortiz, dichos proyectos podrían contar con nuevos adjudicatarios recién en septiembre u octubre del próximo año.
Por lo anterior, y para asegurar el efectivo monitoreo de los trabajos, el jefe comunal de Concepción solicitó al seremi de Obras Públicas que desde ahora la gestión del Puente Bicentenario se radique «en un 100% en la región del Biobío, para que no tengan que venir personas de Santiago a hacer los contratos y ver los avances».
Inversión adicional
Nada sorpresiva fue la quiebra de Claro Vicuña Valenzuela, dado que según relata el seremi de Obras Públicas, Hugo Cautivo Baltierra, dicha entidad ya había demostrado algunos problemas en «su gestión financiera», aunque de manera muy poco transparente. Por ello, explicó, la única opción que ahora queda es terminar anticipadamente el contrato, preparar los antecedentes para el juicio de quiebra y el cobro de las boletas de garantía y, finalmente, buscar a un nuevo adjudicatario.
Junto con lo anterior, el titular regional del MOP descartó que las obras del Puente Bicentenario hayan generado o influido en la quiebra Claro Vicuña Valenzuela, dado que ya habían sido concedidos los adelantos suficientes. «El Ministerio de Obras Públicas ha cumplido cabalmente con sus obligaciones. No puede traspasarse una responsabilidad que es de la empresa privada», enfatizó la autoridad.
En cuanto a los recursos que implicaría terminar esta estructura durante el actual Gobierno, Cautivo sostuvo que debido a los escasos avances y al aumento en los costos de construcción, se proyectan unos $30 mil millones.
Junto con destacar los negativos efectos que la pandemia y la inflación han tenido en el sector de la construcción, el presidente de la Cámara de la Producción y el Comercio Biobío, Álvaro Ananías Itaim, afirmó que es necesario tomar mejores resguardos antes de volver a adjudicar el enlace del Puente Bicentenario
Lo anterior, dijo Ananías, cobra mayor relevancia si se considera que se viene un año «muy duro», en el que los proyectos de inversión serán vitales para reforzar la oferta laboral.