Alza sostenida de los precios de las materias primas, escasez de mano de obra y subsidios con precios desajustados son algunos de los problemas que enfrentan hoy las pymes de la construcción del Biobío. Esta situación, que afecta a cerca de 40 pequeñas empresas, fue presentada por el diputado Gastón Saavedra al seremi de Vivienda y Urbanismo del Biobío, Sebastián Abudoj, en una reunión realizada en las dependencias de esa cartera en Concepción.
El parlamentario explicó que producto de esta realidad, para las pymes hoy resulta inviable mantener las obras de los contratos de reparación y mejora de viviendas, muchas de las cuales se encuentran ya suspendidas o en riesgo de ser abandonadas, ante la imposibilidad financiera de seguir con su ejecución. «Las dificultades que ellos tienen es que los montos de los subsidios no alcanzan a cubrir todo lo que son gastos operacionales. ¿Por qué? Porque subieron las materias primas por la baja importación de ellas y, por tanto, como escasean en el mercado, el precio ha aumentado incluso superando el 106%. Todo lo que se utiliza para este tipo de trabajo está excesivamente alto en su valor y, por eso, las empresas, están viéndose en serias dificultades para continuar con sus operaciones», dijo.
Esta situación impacta a los integrantes de la Organización de Constructoras del Biobío, quienes suscribieron un documento que fue entregado al seremi de Vivienda, en donde dan cuenta de ésta problemática. «El registro del documento que entregamos tiene treinta y seis empresas firmantes, respaldando esto, pero son muchísimas más», agregó Gastón Saavedra.
Expuso que este conflicto tiene una arista más, aludiendo a la repercusión en el empleo en momentos en que se requiere reactivar y potenciar la economía.
Saavedra anunció que espera reunirse con el Ministro de Vivienda con el fin de «pedirle que reevalúe las medidas a aplicar para sostener estos subsidios, para ajustarlos a los precios del mercado y no tener sufriendo, por lo tanto, con esta crisis a esta pequeña y mediana empresa, que tendría que poner plata de su bolsillo para la ejecución de estas obras, cosa que no corresponde, porque para eso están los subsidios que el Estado dispone para poder resolver los problemas de mejoramiento de vivienda en el país¨, concluyó.
Las pymes
Brian Herlitz, vocero de la Organización de Constructoras del Biobío, que agrupa a 40 empresas pequeñas y medianas que trabajan en proyectos de reparación y ampliación de viviendas del SERVIU, dijo que «nosotros estamos pidiendo que el Ministerio de Vivienda se pronuncie respecto a la problemática que se expone. Lo que abordamos en el oficio es una actualización de los subsidios vigentes, es decir, que se tomen estos subsidios y que se actualicen al precio real que hoy existe en el mercado. En este caso nosotros tenemos el cálculo, el cálculo a priori, que es el 25% de incremento y eso fue cuando estudiamos esto».
Agregó que hoy existe más de un 50% de obras paralizadas. A su parecer, la solución no es continuar con la suspensión de obras, sino que lo que esperan es que «estos proyectos vuelvan a la senda de la rentabilidad. En caso contrario, van a ser proyectos que las constructoras no están dispuestas a ejecutar porque son proyectos inviables económicamente¨.